Estadio polideportivo Tüskecsarnok, Budapest
Lo bueno, a veces, se hace esperar.
El llamativo estadio polideportivo de la capital húngara se puso en funcionamiento finalmente en 2014. Originalmente, su ejecución estaba prevista para la EXPO de 1995, que se iba a celebrar en Budapest y Viena. Tras la cancelación de la exposición universal, las obras iniciadas quedaron en suspenso. En el momento de la finalización, casi 20 años después, todo tenía que ser perfecto.
Al ver el estadio, queda claro que se diseñó para ser un edificio especial. Lo más llamativo son los 84 «pinchos» que hay sobre la cúpula, que dejan pasar la luz natural al espacio situado debajo. Por las noches, las puntiagudas pirámides de vidrio pueden iluminarse en distintos colores para llamar la atención sobre el evento que se está celebrando.
Para que el edificio no resultara demasiado macizo, se decidió soterrar su parte inferior. En su interior tienen cabida hasta 3.000 visitantes. El estadio se utiliza principalmente para partidos de hockey sobre hielo, por ejemplo, para los partidos del equipo local de la primera división húngara, el MAC Budapest. Pero también lo utilizan aficionados al deporte y estudiantes de la universidad cercana.
El equipamiento de los sanitarios no es tan deslumbrante desde el punto de vista arquitectónico, pero ofrece la máxima calidad. Las griferías tenían que ser higiénicas y mantenerse visualmente atractivas con el paso del tiempo. Eso inclinó la balanza a favor de los productos de SCHELL. Pero las griferías de lavabo y ducha de alta calidad no solo son especialmente duraderas y fáciles de limpiar, sino que también contribuyen al ahorro de agua. Porque un edificio que se ha hecho esperar 20 años debe ser también especialmente sostenible.